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Ahora que, tras un verano más largo de lo normal, parece que llega realmente el otoño, quizá sea recomendable realizar una revisión en los talleres de coches en Zaragoza, de manera que nuestro coche esté en perfecto estado. Ya que las condiciones meteorológicas tienden a ser más adversas, todas las piezas y elementos de nuestro vehículo deberían estar a punto.
Las causas más frecuentes de accidentes de tráfico en invierno no son debidas, sorprendentemente, al estado de las carreteras, sino a la infracción de los límites de velocidad, distracciones o maniobras no permitidas. De hecho, solo 8 de cada 100 accidentes se producen con hielo o nieve. Pero una revisión en los talleres de coches en Zaragoza es crucial para que, respetando las normas de circulación, no suframos ningún percance.
En primer lugar, es fundamental comprobar el estado de nuestros neumáticos. En este caso, el dibujo es muy importante. Existen neumáticos especializados para la lluvia o nieve aunque, de por sí, los que usamos regularmente sirven. Tenemos que comprobar que el dibujo conserva un grosor de más de 1,6 mm. Esta medida es la profundidad mínima legal, pues se considera que es la necesaria para tener un correcto agarre. Además, la escultura también tiene su motivo. Cuantos más canales posea nuestro neumático, más capacidad de bombeo de agua tendrá, facilitando así la adherencia al asfalto.
Otro elemento clave son los frenos. Hay que asegurarse de que el sistema de frenado de nuestro automóvil funcione efectivamente. La distancia de frenado aumenta en asfalto mojado, por lo que, si a este factor intrínseco le añadimos una mala función extrínseca, el resultado será catastrófico, pues no conseguiremos frenar a tiempo. Por último, hay que valorar que los focos iluminen con la fuerza adecuada y no estén fundidos, pues son indispensables en momentos de niebla con visibilidad reducida.
Desde Mecanisport te recomendamos un control estricto y mucha precaución.